El preservativo se convierte cada vez más en un objeto de consumo, y deja de ser un incordio.Se pueden eliger colores, sabores y texturas. Y su uso está casi totalmente incorporada y normalizado en la vida sexual de jóvenes y adultos.
Para más gloria del preservativo, estudios recientes aseguran que no interfiere en la calidad de las relaciones sexuales ni en la satisfacción de a pareja.
Los resultados de un estudio norteamericano, que publica el último número de la revista científica 'The Journal of Sexual Medicine', muestran que las personas califican sus relaciones sexuales como "altamente excitantes y satisfactorias" tanto si utilizan preservativos y lubricantes como si no lo hacen. Los datos proceden de la encuesta 'National Survey of Sexual Health and Behavior' realizada a hombres y mujeres de edades comprendidas entre los 18 y 59 años.
Entre quienes reconocieron haber utilizado preservativo en su último encuentro sexual (27,5% de hombres y 22,3% de mujeres), son los varones los que están más seguros del tipo de condón empleado (23,6% de hombres frente al 8,9% de las mujeres) y de si éste estaba lubricado (26,6% y 11,4%, respectivamente).
"Esto puede deberse a que los hombres siguen siendo los que compran los condones y los que se lo colocan a si mismos” explicó Debby Herbenick, doctora de la Escuela de Salud Pública Bloomington, de la Universidad de Indiana (EEUU) y una de las principales autoras.
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